Comenzó enero y uno de tus propósitos era mejorar tu físico este año. Te apuntaste al gimnasio, fuiste constante y has estado yendo varios días por semana, cumpliendo todos tus objetivos pero, aún así, ¿no logras ver resultados?

Esto puede deberse a varios motivos, pero el principal es que hay que entrenar con cabeza. No se trata sólo de hacer mucho ejercicio o hacerlo de forma regular, hay otros factores que también resultan esenciales. 

• El descanso

Es fundamental para el crecimiento muscular, ya que el proceso anabólico que se encarga de “crear el músculo” tiene lugar mientras dormimos. Para que tu descanso complemente de manera adecuada a tus entrenamientos debes dormir unas 7-8 horas al día. Además, el tiempo entre entrenamientos debe ser de entre 24-48 horas, para que la recuperación muscular sea correcta. Incluso el tiempo entre series es algo que debemos tener en cuenta. Es importante informarse correctamente sobre la importancia del descanso en los entrenamientos.

• La alimentación

Ésta dependerá del ejercicio que hagas y tus objetivos. En este punto es importante consultar a un profesional. Una dieta restrictiva en calorías, enfocada a bajar de peso, no te ayudará a ver resultados en el gimnasio. Necesitas que tu alimentación complemente tus objetivos, que pueden ser: perder peso, definición, hipertrofia, aumentar fuerza, aumentar peso… Una correcta alimentación es esencial para ver los resultados de tu esfuerzo en el gimnasio. 

• Plan de entrenamiento

Entrenas todos los días, de forma disciplinada, pero no tienes un plan de entrenamiento. Esto limitará tus resultados, ya que no sabes hacia dónde estás enfocando tus esfuerzos. Hay que entrenar de forma consciente, teniendo en mente qué queremos lograr, qué grupos musculares queremos trabajar y cuántas sesiones o repeticiones necesitamos de cada uno para que éstas sean fructíferas. Es esencial seguir los consejos de profesionales, no sólo para optimizar resultados, sino para evitar lesiones.

• Repetición

Este punto está ligado con el anterior. Si siempre practicas la misma rutina, tus resultados serán limitados. En primer lugar, porque los músculos se adaptarán y los ejercicios dejarán de resultar un esfuerzo. Este síntoma no es malo, ya que implica que has logrado una mejora, pero debemos actuar en consecuencia, modificando las rutinas de entrenamiento para mantener el proceso. 

Éstos son los factores más comunes que suelen llevar a los principiantes a desanimarse, ya que no conocen la importancia del descanso, la alimentación o la programación de los entrenamientos y, ante la falta de resultados, deciden desistir. 

Lo esencial es que te asesores por un profesional. En Adeslas, contamos nutricionistas expertos que pueden ayudarte a adaptar tu alimentación para que resulte el complemento ideal de tus entrenamientos. Si buscas el complemento perfecto para mejorar tu salud, ¡llámanos!